Bocaditos de leche

   *** En muchas ocasiones nos queda pan del día anterior y no sabemos cómo aprovecharlo. Una buena idea es elaborar unos buñuelos dulces para el postre o la merienda. De esta forma le damos salida al pan y seguro que los mas golosos de la casa lo agradecerán.

   INGREDIENTES:

 - 1 barra de pan
 - 400ml de leche entera
 - 4 cucharadas de azúcar
 - 1 rama de canela
 - 1/2 vaina de vainilla
 - 2 trozos de piel de naranja
 - 1 huevo fresco
 - 200ml de aceite de oliva suave
 - 2 cucharadas de azúcar y 1 cuchradita de canela molida para rebozar
 - Moldes de acero para cortar pastas

   ELABORACIÓN:

   Ponemos un cazo al fuego mínimo y le incorporamos la leche, la piel de naranja bien limpia, la canela y la vainilla abierta para que suelte más aroma. Dejamos que se caliente y dé un hervor. Retiramos del fuego, agregamos las cuatro cucharadas de azúcar y removemos. Dejamos que se temple en el mismo cazo.

   Retiramos la corteza del pan dejando la miga limpia y troceada dentro de un bol.

   Bañamos la miga con la leche teniendo la precaución de pasarla antes por el colador para retirar los ingredientes que la aromatizaron.

   Dependiendo del tipo de pan, necesitaremos más o menos leche, por lo que recomiendo que incorporemos la leche poco a poco para no dejar demasiado líquida la masa.


   Batimos el huevo y lo añadimos al bol. Mezclamos bien con ayuda de un tenedor y dejamos reposar 5 minutos.  Pasado este tiempo, volvemos a remover y veremos que la masa ha quedado algo mas densa. 

   Colocamos una sarten en el fuego grande a media fuerza, incorporamos el aceite y metemos unos moldes de acero con formas variadas. 

   Cuando el aceite esté caliente, bajamos al mínimo el fuego y vamos rellenando los moldes de masa ayudándonos con un cucharón. Dejamos que se cocinen hasta que veamos que se doran.

   Damos la vuelta a los buñuelos ayudándonos de dos palas de cocina y procurando mantener los moldes con la masa un rato para evitar que la masa se deforme.

   Quitamos los moldes dejando que terminen de hacerse los bocaditos por la otra cara.


   Los sacamos del aceite y dejamos que escurran en un plato forrado de papel de cocina.

   Volvemos a meter los moldes al aceite y realizamos el mismo proceso hasta que no quede masa.

   En un plato mezclamos las dos cucharadas de azúcar con la canela molida y rebozamos los buñuelos ya escurridos.

   Presentamos en una fuente y consumimos cuando estén aun templados.

   Si no se consumen todos los bocaditos, podemos dejarlos en un thaper con la leche aromatizada sobrante bien tapados dentro del frigorífico, y antes de consumirlos dejar que se templen a temperatura ambiente. De ésta forma quedan empapados y muy jugosos.