Montaditos de solomillo de cerdo con mermelada de pimiento

   *** El otro día me regalaron tres pimientos rojos de cultivo propio y rápidamente tomé la decisión de elaborarlos en mermelada para poder disfrutar de ellos en más de una ocasión.

   INGREDIENTES:

 * Para la mermelada.

 - 300g de pimientos rojos
 - 200g de tomates de rama
 - 125g de azúcar
 - 200ml de agua
 - 1/2 limón

 * Para los montaditos.

 - 1 barra de pan rustico
 - 1 solomillo de cerdo
 - 50g de queso rulo de cabra
 - 1 cucharada de aceite de oliva
 - Hojas de albahaca fresca
 - Sal en escamas

   ELABORACIÓN:

   Lavamos muy bien los pimientos y los secamos. Después los limpiamos de tallo y semillas. Se trocean lo más pequeño que se pueda y se ponen en la cazuela donde tengamos previsto cocinar la mermelada.

   Escogemos los tomates de rama más maduros, se lavan y se pelan. 

   Partimos por la mitad y retiramos las semillas que pondremos en un colador. La pulpa se trocea de igual manera que el pimiento.

   Con ayuda de una cuchara, exprimimos las semillas y sacamos todo el jugo posible que contengan.

   Mezclamos los tomates con los pimientos picados y les ponemos el azúcar, el jugo del tomate el agua y el zumo de medio limón. Tapamos la cazuela y dejamos que macere a temperatura ambiente durante 1 hora.

   Pasado este tiempo, encendemos el fuego al máximo y dejamos que rompa a hervir. Después bajamos al mínimo y tapamos la cazuela, dejando que se haga muy despacio durante 2 horas removiendo de vez en cuando.

   Por último, avivamos un poco el fuego y dejamos que reduzca el jugo hasta que se obtenga una textura melosa.

   Rellenamos los tarros con la mermelada hasta el borde y cerramos con la tapa. Les damos la vuelta para que se haga el vacío y dejamos que se enfríen. Una vez fríos, se pueden guardar en un lugar oscuro y fresco, pero no es necesario meterlos en el frigorífico hasta que se abran y se empiecen a consumir.

   Para los montaditos, tenemos que hacer rebanadas no muy gruesas con un pan rústico recién horneado.


   Extendemos el queso de cabra sobre las rebanadas de pan, dejando una buena capa.


   Pasamos a la plancha los filetes de solomillo con un poco de aceite de oliva y el fuego medio- fuerte poniendo la sal una vez hecha la carne para evitar que se desjugue.


   Colocamos un filete sobre cada rebanada de pan.

   Escogemos un plato rectangular plano y distribuimos cuatro montaditos en cada plato.

   Abrimos el tarro de mermelada de pimientos y repartimos una cucharadita de ésta por encima de cada solomillo.

   Decoramos con una hoja de albahaca fresca y listo para tomar.

   Es increíble la sensación que deja en el paladar la conjugación de estos ingredientes tan diferentes.