*** Preparar unas pastas con frutas confitadas no lleva demasiado tiempo y, las podemos tener tanto para regalar o para ofrecer en casa cuando nos viene algún amigo a tomar el té.

- 250g de harina de trigo fina
- 120g de azúcar
- 140g de mantequilla
- 3 yemas de huevo fresco
- 5g de sal
- 25g de naranja confitada
- 25g de guinda confitada
- Leche para dar brillo
ELABORACIÓN:
* Encendemos el horno a 180º posición aire forzado, o en su defecto calor en parte baja. Rejilla a media altura.

Lo primero que tenemos que hacer es picar las frutas y pesar todos los ingredientes.

La mantequilla la pasamos unos segundos por el microondas ya troceada para dejarla en punto pomada.

Cuando tengamos la mantequilla cremosa, le añadimos el azúcar y batimos con las varillas manuales hasta que consigamos una crema blanquecina.

Añadimos una a una las yermas de huevo, batiendo con energía para que se queden bien ligadas.

Incorporamos las frutas al bol y una cucharada de harina a la que ya habremos puesto la sal. Mezclamos con las varillas.

Retiramos las varillas, añadimos las tres cuartas partes de la harina que nos queda y amasamos con la mano. Si la masa nos pide más harina se la vamos añadiendo poco a poco hasta que se despegue de la mano y se pueda trabajar con facilidad.


Pincelamos las bolitas con un pincel mojado en leche fría.


Cuando saquemos las pastas del horno, las dejamos sobre una rejilla para que se enfríen.
Una vez bien frías, las podemos guardar tapadas en un lugar fresco y seco.

También se puede preparar una cajita de cartón forrada con papel seda, llenarla de pastas y...

Seguro que un regalo como éste no se olvida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario