Caprichos de Mayte: Bocaditos de ternera con flor de patata, tomate y pimiento

*** Hoy os propongo un plato combinado de los de toda la vida, pero con un nombre y una presentación muy particular. ¡ Espero que os guste !

INGREDIENTES:

- 1/2k de ternera picada

- 1 huevo fresco
- 3 rebanadas de pan de molde
- 2 cucharadas de leche
- 1/2 pastilla de caldo de ave concentrado
- 1/2 cebolla pequeña
- 3 cucharadas de harina para el rebozado
- 2 pimientos verdes
- 1 tomate grande y maduro
- 2 patatas grandes
- 5 o 6 rodajas de boniato
- 250ml de aceite de oliva
- Sal normal y en escamas
- Pimienta y orégano
- Brotes tiernos de espinacas y rúcula

ELABORACIÓN:

Cuando compremos la carne, le pedimos al carnicero que nos escoja una pieza de ternera que salga jugosa y la pase dos veces por la máquina.

La carne picada aguanta poco tiempo en buen estado, por lo que recomiendo consumirla el mismo día de comprarla o congelar si su consumo lo tenemos previsto para otro momento.

Ponemos una sarten pequeña al fuego suave con dos cucharada de aceite. Mientras, podemos limpiar y picar la cebolla que incorporamos a la sarten con una pizca de sal cuando el aceite alcance temperatura. Dejamos que se poche tapada unos minutos, mirando de vez en cuando par evitar que se queme.

Batimos el huevo en un bol, retiramos la corteza al pan y lo troceamos.

Mezclamos el pan con el huevo y le añadimos la leche. Condimentamos la crema obtenida con la pastilla de caldo concentrado un poco machacada, una cucharadita de orégano y un poco de pimienta recién molida. Removemos y dejamos que repose mientras termina de hacerse la cebolla.

Agregamos la cebolla al bol y lo pasamos todo por la batidora.

La crema obtenida se la ponemos a la carne y con la ayuda de un tenedor, vamos incorporándola hasta que esté totalmente ligada.

Elaboramos las albóndigas pasando porciones pequeñas de carne por harina y formando bolitas con ayuda de las manos.

Según vamos haciendo bolitas, las colocamos en la encimera previamente forrada con film transparente.

Ponemos una sarten mediana al fuego con 50ml de aceite y cuando tome temperatura, freímos las albóndigas bajando la fuerza del fuego para evitar que se quemen por fuera y se queden crudas por dentro.

Cuando tengamos todas las bolitas fritas, las reservamos en un lugar templado para que no se enfríen demasiado.

Pelamos y partimos las patatas en rodajas finas y enteras. Las metemos en agua fría que las cubra para que suelten almidón y endurezcan.

Lavamos los pimientos enteros, los abrimos por la mitas y les quitamos las semillas. Hacemos trozos no muy grandes y freímos en una sarten mediana con 4 cucharadas de aceite. Los tapamos y bajamos el fuego al mínimo. Moveremos de vez en cuando para que se hagan por igual.

En el fuego más grande, colocamos una sarten ámplia con el resto del aceite. Escurrimos las patatas muy bien y las freímos metiéndolas de una en una en el aceite bien caliente. Cuando estén todas las rodajas en la sarten, bajamos el fuego a la mitad para que no se quemen.

Lavamos el tomate, lo cortamos en rodajas gordas y lo colocamos en un plato.

Tapamos el plato del tomate y lo metemos en el microondas para que se cocine durante 1 minuto a máxima potencia.

Ponemos una plancha al fuego y cuando la tengamos caliente, incorporamos dos cucharadas de aceite del que tenemos en las sarten de las patatas y pasamos las rodajas de tomate para que se doren y se terminen de hacer. Antes de darles la vuelta, las salpimentamos.

Sacamos los pimientos de la sarten a una bandeja y en ese mismo aceite, freímos las rodajas de boniato medio minuto por cada lado.

Sacamos las patatas de la sarten a un plato y les ponemos un poco de sal.

Como los bocaditos se habrán quedado un poco fríos, les podemos dar un golpe de microondas durante 1 minuto a media potencia.

Montamos los platos colocando unas rodajas de patata de forma circular en un lado del plato.

Sobre las patatas, ponemos una rodaja de tomate que espolvoreamos con un poco de orégano.

Los pimientos se reparten por el centro del tomate dejando que se vea una corona roja. Les ponemos una pizca de sal, porque no se les puso anteriormente.