*** Las tartas o quiches dan mucho juego, sobre todo cuando ponemos ese toque personal en los ingredientes y la presentación. Seguro que ésta ¡os enamora!
INGREDIENTES:- 1 masa de quiche (*)
- 1 calabacín mediano y gordito
- 3 puerros
- 4 tomatitos confitados (*)
- 50gr de queso grana padano
- 200ml de nata líquida
- 3 huevos frescos
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal y pimienta
* Los ingredientes y elaboración de la masa para quiche la podéis encontrar en el mes de febrero, receta " Quiche de puerros en tulipas " día 24.
* Los tomatitos confitados están en el mes de mayo, receta " Tomatitos de rama confitados " día 20.
ELABORACIÓN:
Si queremos organizarnos mejor el tiempo, podemos tener la masa preparada de otro día y descongelarla, pero si la elaboramos en el momento, tenemos que contar con el tiempo que necesita de reposo en el frigorífico.
De los puerros, sólo gastaremos la parte blanca, reservando la parte verde para una crema o una tortilla.
Ponemos una sartén grande a calentar con el aceite al fuego mínimo. Mientras alcanza temperatura, lavamos los puerros y troceamos en rodajas no muy finas. Incorporamos a la sartén y espolvoreamos una pizca de sal, removemos y tapamos para que se hagan con el jugo que sueltan.
Despuntamos el calabacín y lo lavamos. Con ayuda de un pelador sacamos unas tiras que dejaremos reservadas para decorar.
El resto del calabacín lo troceamos y se lo añadimos al puerro cuando éste lo tengamos blando. Removemos, dejamos que se haga sin tapar y subiendo un poco la fuerza del fuego para que no suelte mucho jugo el calabacín. Tampoco pondremos sal.
Los tomatitos se pueden tener confitados en el congelador, pero si no tenemos, se puede poner tomate en rodajas finas macerado con una pizca de azúcar y albahaca fresca picada. 
Cuando tengamos el calabacín frito, apagamos el fuego y agregamos el queso que tenemos cortado en lascas. Mezclamos bién y tapamos para que no pierda mucho calor.
** Encendemos el horno a 190º posición aire forzado, o en su defecto calor en parte baja para terminar con calor arriba y abajo. Rejilla a media altura.
Sacamos la masa del frigorífico y forramos la encimera con film transparente. Estiramos la masa sobre el film con ayuda de un rodillo dándole la forma y tamaño del molde que tengamos dispuesto para hornear.
Forramos el molde con papel vegetal y pasamos la masa ya estirada a éste, retiramos el film y pinchamos con un tenedor. Reservamos mientra terminamos de preparar el relleno.
Batimos los huevos y les mezclamos la nata. Lo incorporamos a la sartén que ya tendrá el queso fundido y removemos bien para que se liguen los ingredientes. Salpimentamos.
Rellenamos la masa que tenemos en el molde con la mezcla de la sartén y decoramos con las láminas de calabacín y los tomatitos confitados. Espolvoreamos un poco de queso en polvo y metemos al horno durante 30 minutos.
Transcurrido éste tiempo, pasamos el calor arriba y abajo para que se dore un poco. Sacamos del horno y dejamos que repose unos minutos antes de servir.
La tarta se puede tomar caliente, templada e incluso fría del tiempo, no de frigorífico.
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