lunes, 13 de enero de 2014

Guacamole al estilo mexicano


*** Hace unos cuantos días que no escribo y seguro que me habéis echado de menos. Pero aquí estoy de nuevo., dispuesta a contaros todo aquello que elabore en mi cocina.

   Ya tengo una receta de guacamole en el blog, pero ésta es muy especial para mí, porque la he personalizado y dado ese toque que la hace diferente. ¡ Espero que no se me enfaden los mexicanos !

   INGREDIENTES:


 - 1 Aguacate grande y maduro
 - 1/2 cebolleta pequeña
 - 1/2 tomate mediano maduro
 - 1 diente de ajo pequeño
 - 4 o 5 ramas de cilantro fresco
 - 2 cucharadas de aceite de oliva
 - 1/2 limón
 - Sal al gusto
 - Tabasco al gusto
 - Picos de maíz tostados

   ELABORACIÓN:

   Para que el guacamole nos quede perfecto, es muy importante que el aguacate esté en su punto óptimo de maduración. Porque si está duro, no será posible trabajarlo con el tenedor y tanto el sabor como la textura nos cambiarán totalmente. Pero, si por el contrario está demasiado maduro, nos quedará como mantequilla y tampoco nos resultará agradable al paladar.

   Preparamos un bol mediano para trabajar el picadillo que se elabora por separado. Limpiamos la cebolleta, cortamos la mitad y picamos lo más fina posible. La colocamos en el bol y reservamos.

   Lavamos el tomate, lo pelamos y partimos en gajos gordos. Les sacamos las semillas que colocaremos en un colador metálico sobre un cuenco y exprimimos con una cuchara hasta sacar completamente su jugo, que reservaremos para elaborar con él unos chupitos.

   Picamos el tomate lo más menudo posible y colocamos la mitad en el bol, guardando el resto en el frigorífico para un sofrito o una ensalada.

   Lavamos bien el cilantro y lo secamos con papel de cocina. Desprendemos las hojas de sus tallos y reservamos unas pocas para picarlas, el resto se ponen en un mortero junto con el ajo y un poco de sal gorda.


   Lo majamos y le exprimimos parte del zumo de medio limón. 



   Añadimos el aceite según mezclamos para que ligue un poco.


   Juntamos éste majado con el tomate y la cebolleta que tenemos en el bol, lo removemos un poco y dejamos reposar para que macere.

   Partimos el aguacate por la mitad y separamos las dos partes practicando un pequeño giro en sentido contrario con las dos manos.

   Volvemos a partir en cuartos y el hueso lo quitamos dando un golpe seco con el cuchillo y realizando otro giro mientras sujetamos la pulpa con la mano.


   Desprendemos la piel del aguacate tirando de ella de la misma forma que se pela un plátano.

   Colocamos el aguacate en un plato y lo cortamos en trozos pequeños. Exprimimos el resto del limón y salamos ligeramente.

   Machacamos estos trozos con ayuda de un tenedor hasta obtener una pasta algo grumosa.

   Le incorporamos el picadillo que tenemos en maceración procurando que todos los ingredientes queden bien mezclados.

   Añadimos unas gotas de Tabasco y seguimos removiendo. La cantidad de Tabasco dependerá de lo picante que nos guste, por lo que aconsejo empezar por pequeñas dosis hasta encontrar el punto adecuado.

   Seguidamente, escogemos unos vasos de chupito y les pasamos el borde por la pulpa del limón para que se queden mojados.

   Metemos los vasos en el salero para que se quede cubierto el borde con un aro de sal.

   Aliñamos el jugo de tomate que tenemos reservado con unas gotas de Tabasco y lo pasamos a los vasos con ayuda de un embudo.

   Espolvoreamos una pizca de cilantro picado sobre el jugo de tomate y reservamos.

   Servimos el guacamole en un plato cuadrado y hondo decorándolo con unos triángulos de maíz tostado y acompañado de los chupitos de jugo de tomate.

   Os aseguro que cuando probéis éste guacamole mexicano personalizado, quedaréis sorprendidos por su sabor, y seguro que lo elaboraréis más de una vez, aunque seáis unos torpes en la cocina.


2 comentarios:

  1. Mmmmm.... Q rico! Vaya manera tan creativa de enriquecer este platillo. Enhorabuena! Sigue escribiendo tus recetas. Saludos desde México. Más específicamente desde Morelia, Michoacán.

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  2. Me agrada muchísimo ver que a los mexicanos les ha gustado mi personalización de su guacamole. Es bueno crear pequeños cambios que hacen a nuestros platos más atractivos respetando su auténtico sabor.

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