No hay nada mejor para un niño que disfrutar mientras aprende, y si además lo que hace se puede comer, mucho mejor, porque de esta forma se le hace partícipe del trabajo que conlleva el elaborar una comida y su actitud ante el consumo de ésta.
La cocina es el mejor laboratorio donde los niños pueden experimentar con los colores, los sabores, los olores, las texturas... Pero además trabajan la destreza manual, y sobre todo desarrollan su imaginación.
*** Aquí tenéis una receta en la que los niños pueden colaborar. Solo habrá que tener cuidado a la hora de hornear.
INGREDIENTES:
- 230gr de harina fina
- 125gr de mantequilla
- 75gr de azúcar blanca
- 75gr de azúcar morena
- 175gr de chocolate de cobertura
- 1 huevo fresco
- 1 cucharadita de moka de vainilla en polvo
- 1/4 de cucharadita de postre de sal
- 1 cucharadita de postre de levadura en polvo
*** Encendemos el horno a 190º posición aire forzado, calor con aire en todo el horno, o en su defecto posición de calor abajo con un golpe de grill para dorar en los dos últimos minutos.
Posición de la rejilla a media altura.
ELABORACIÓN:
Pesamos todos los ingredientes por separado y cuando lo tengamos, ponemos a calentar la mantequilla en el microondas durante 10 minutos a máxima potencia para que quede punto pomada.
Tamizamos la harina para quitar los posibles grumos y se mezcle con más facilidad, añadiendo a ésta, la sal, la vainilla y la levadura, mezclando bien con ayuda de unas varillas metálicas.
Si no tenemos vainilla, podemos sustituirla por canela en polvo, y en este caso pondremos la cantidad de una cucharadita de postre colmada.
Incorporamos a la mantequilla ya blanda los dos tipos de azúcar y batimos con energía antes de incorporarlo a la harina.
Movemos con las varillas un poco y batimos el huevo para añadirlo a la masa y seguir mezclando.
Cuando no podamos seguir con las varillas, amasamos con la mano y si fuese necesario, añadimos un poco más de harina hasta que la masa se despegue de la mano con facilidad.
Picamos el chocolate en trozos pequeños y lo agregamos a la masa que seguimos amasando con la mano.
Forramos una bandeja de horno con papel vegetal. Hacemos bolas de masa con las manos no muy grandes y las colocamos sobre el papel con una separación de unos 6 u 8 cm porque cuando se calientan en el horno se expanden quedando la forma de galleta redonda.
Cuando tengamos la bandeja llena de bolas de masa, la metemos al horno durante 12 o 15 minutos dependiendo del tamaño, y mientras se hornean, ponemos más bolas de masa en otra bandeja para hornear en cuanto saquemos las que se están haciendo.
Una vez tengamos una tanda de galletas hechas, las pasamos sobre la rejilla para que se enfríen, porque si las dejamos en la bandeja caliente, continúan haciéndose y se quedarían duras. Además, necesitamos la bandeja para poner otra hornada de galletas.
Con la cantidad de masa que tenemos, nos pueden salir unas 30 galletas de 5 cm. y os puedo asegurar que se tarda más en hacerlas que en comerlas, por lo que aconsejo hacer el doble para la próxima vez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario